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sábado, 28 de julio de 2012

La desigualdad después del (multi)culturalismo. Luís Reygadas


¿A dónde va la antropología

¿De donde viene la antropología?

¿A dónde nos gustaría que fuese?

Se vive el auge del multiculturalismo como herencia y reformulación de la corriente culturalista, si, aquella que opto por el campo de las significaciones y el estudiar a la cultura desde las construcciones mentales legitimadas por una colectividad que dan sentido al espacio y sus relaciones.
 La antropología  reivindica a los pueblos llamados “indígenas”, la proliferación de textos referidos al simbolismo, a la cosmovisión al lenguaje, etc.,  son el debate teórico dentro de esta.  En América latina existen múltiples realidades de análisis, pero sin duda alguna el debate sobre lo multi étnico se lleva la mayor parte de la atención.

Existe una preocupación para la antropología latinoamericana,  Luís Raygadas en su texto nos presenta uno de los tópicos menos analizados y puestos en debate dentro de las corrientes de pensamientos que sucedieron a las corrientes evolutivas y funcionales. Este tópico es el de la “desigualdad” el argumenta que dentro de los estudios antropológicos la desigualdad ha sido relegada  precisamente por el impacto que ha tenido el multiculturalismo, claramente no demeritando lo valioso de esta corriente pero si precisa que la fascinación o manipuleo político ha mermado el interés por procesos sociales que se reproducen por el crecimiento económico de una burguesía que a su ves incrementa la desigualdad en los sectores pobres de la sociedad latinoamericana.

Raygadas nos argumenta desde su experiencia como estudiante durante la década de los 70s, en su formación como antropólogo  la importancia del marxismo y su aporte dentro de la antropología.  Tras la severa crítica al indigenismo en gran parte de  América latina la influencia del marxismo se hizo presente  en las constantes tenciones políticas. Se argumentaba el creciente en las economías bajo el impacto del capitalismo subdesarrollado, pero a su vez  analizaba las consecuencias del crecimiento económico en resultados de desigualdad. 

Raygadas nos menciona tres inconstantes de la teoría marxista como eje de análisis de la desigualdad en la antropología:

1.-El análisis marxista toma muy poco en cuenta los factores culturales, en la producción y reproducción de las asimetrías. La desigualdad aparecía  como producto exclusivo  de modelos económicos, aislados de sus contextos culturales. 

2.-El segundo termino subsumía los aspectos étnicos de la desigualdad a las diferencias de clase

3.-Exclusión de las mujeres en estudios de explotación y subordinación.

4.-Poca importancia hacia la exclusión de sectores a los que no se toma en cuenta en la distribución de la riqueza

La exclusión se argumento en que las llamadas sociedades excluidas eran las responsables al no integrarse a un modelo de producción ni a los beneficios y distribución de las riquezas.

Durante el auge del marxismo (los finales de los 60s y  70s)  se pierde de vista por un tiempo la importancia en los cambios socio-culturales pero aún así era totalmente necesario, los procesos políticos gestados en Europa tuvieron repercusiones en América.

En los 80s y 90s, nos dice Raygadas que la antropología tiene un importante avances en los estudios relacionados con temas de genero, simbolismo, étnicidad y pobreza, pero aún seguían relegando el problema de la desigualdad.

El giro cultural y el estudio de la desigualdad

El giro cultural dotó de nuevas formas para dar cuenta de la desigualdad par entender la centralidad  de los procesos simbólicos en la constricción y reconstrucción del estatus las jerarquías y las disparidades ( Raygadas, )

Estos nuevos enfoques influenciados por la antropología política y simbólica recurren a la reproducción de una sociedad mediante la repartición del poder mediante la legitimación de ciertos símbolos políticos y culturales que legitiman una estratificación social.  Algunos de estos estudios culturalistas no reflejaron en cabalidad la importancia simbólica en la construcción y reproducción de un sistema social, no dieron cuenta que a partir de ciertos esquemas de pensamiento se legitima practicas de desigualdad, incluso en las llamadas sociedades indígenas (exclusiones de género)

Y aún más era necesario poner atención en el choque existente entre las sociedades llamadas tradicionales y aquella sociedad reflejo de un modo de producción y de aquellos que se benefician en gran manera de la repartición de las riquezas y donde las sociedades pobres  se ven afectado en primera estancia, donde las decisiones que competen a una nación  se gestan desde un grupo legitimado por un estado de derecho inconocible por los sectores llamados excluidos marginales.


El ascenso del Multiculturalismo

El multiculturalismo da cuenta de la multiplicidad de grupos étnicos y ahora si participación dentro del estado-nación, Raygadas nos dice que durante el transcurso de la década de los 90s, los procesos de migración, |la expansión del modelo económico, la proletarización del campo, el implemento de nuevas políticas, han propiciado un terreno matizado por múltiples ideologías. Este carácter multiétnico ha servido también para crear escenarios de diálogos y debates para legitimar  el derecho a la diversidad y para fomentar la creación de instituciones multiculturales con el discurso intercultural.
                    
Raygadas propone tres aspectos que deberían ser menester en los estudios multiculturalista:
  1. la preservación de las culturas tradicionales.
  2. la relación entre la diversidad cultural y el derecho a la igualdad.
  3. el problema de la exclusión  en una sociedad multicultural.


Raygadas se pregunta, o nos pregunta, ¿Hay que preservar las culturas tradicionales?


Raygadas argumenta, que se a creado un discurso gestado desde el pensamiento político del Estado en preservar las sociedades llamas indígenas, para  reguardar un modo de pensamiento tradicional, así como también una historia que antecede la formación del estado nación. Pero ¿Qué versión  de las culturas indígenas hay que rescatar?  La cultura es la expresión de códigos y significados que dan coherencia a un grupo, este orden se da mediante la confirmación de un poder diferenciado que propicia la participación del sujeto mediante la concesión de un poder representativo a un grupo minoritario. Si ese es el caso, la “cultura llamada indígena” no está exenta de procesos de desigualad y de participación de los sujetos que conforman esta sociedad.


 Es sabido hoy día que  la cultura está en proceso de cambios constantes, esta se reinventa al introducirse nuevos mecanismos de significación que legitiman un orden diferenciado. Por que el estado a de querer “preservar” la cultura indígena. Salta al escenario que el indígena es ya un concepto que refiere a un grupo sublevado, rentado y domesticado.  Esto a mi punto de vista me refiere otro proceso de exclusión y de integración inmediata bajo la diferenciación étnica legitimando un racismo institucionalizado.  Con lo que he mencionado anteriormente no demerito las formas organizadas de los  pueblos mal llamados “indígenas” por el contrario es necesario poner énfasis en las formar organizativas y en el contexto simbólico que aun no ha sido centralizado  ni manipulado por el estado para hacerlo parte de su discurso y así dar cuenta de aquellos proceso socioculturales de los llamados desiguales o excluidos.

Entonces ¿es plausible hablar de una antropología indianista, rescatista y preservadora de “las culturas indígenas”?

Claramente la respuesta es no,  no podemos contradecirnos teórica ni prácticamente, el antropólogo tiene la sujeción a dar cuenta de los cambios que se suscitan en una sociedad, aunque muchas veces nos dejamos nublar bajo discursos gobiernistas de conservación o  simplemente por el arraigo de nuestra formación o aprehensión cultural y es ahí donde de una u otra manera el antropólogo ha sido herramienta de sujeción y colonialismo , de estatificar a la cultura y de hacer de esta no más que un producto vendible y manéable  para los intereses de pocos.

Diferencia cultural y derecho a la igualdad ¿diversos pero explotados?

Se ha aceptado la diferencia cultural (racismo) se ha legitimado el derecho a la igualdad (racismo institucionalizado discursos sexistas)
Los multiculturalista luchan por  derechos de las minorías,  por la participación de estas en las dediciones que les competen, se implementan programas de asistencia y de participación racional.  Estos programas nos dice Raygadas sonde indole universal, asisten a la mayor parte de las poblaciones segmentadas culturalmente,. Hoy sabemos que son un fracaso, razón, no son universales, han servido de pretexto ara homogenizar la participación de una población que sirve de carne de cañón. Las poblaciones diferenciadas son una cifra que por supuesto no abarcan su totalidad, por el contrario han formado parte d un discurso muy discutible que por el contrario no ha puesto interés en la otra gran parte de la población a las que no llegan los programas asistenciales y que sufren el  resultado de un modo de producción y explotación  económico.

Multiculturalismo y Exclusión: ¿Cómo enfrentar  la desconexion?

La desigualdad se origina por dos mecanismos principales: la explotación  y el  acaparamiento  de oportunidades

Ambas contextualizadas dentro de un concepto: la exclusión, que sería la incondición del individuo  sujetarse dentro de un modelo de producción sin ninguna participación dentro de esta, sin gozar de la debida repartición de la riqueza, sin atender a las necesidades propias de su colectividad.

¿A dónde va la antropología?

Tres reflexiones

a) Finales del vuelco del culturalismo

Reflexionar sobre el sistema de significaciones representadas en símbolos y  referiremos sistemas  a los procesos sociales.  Geertz


b)      la antropología vive  en una transición  desde el paradigma multiculturalista  a la exploración  de las relaciones interculturales ¿!!!!


c)       La antropología y su aplicación practica.


                                                                                                                   Segismundo. M.





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